Entre mil novecientos setenta y cuatro y dos mil dos, Saint Laurent diseñó en estas salas las compilaciones que convirtieron para siempre al vestuario femenino. Fue su ex-compañero y cofundador de la firma, Pierre Bergé, quien se empeñó en transformar estos históricos recovecos en un museo. También Marrakech, urbe en la que el diseñador francés natural de Argelia vivió largas temporadas hasta su muerte en dos mil ocho, va a abrir el próximo diecinueve de octubre un museo en su honor.
Despedido de Dior, Saint Laurent, transformado en el directivo artístico más joven del planeta cuando con veintiuno años aceptó ese cargo en Dior, creó su marca al lado de Bergé 4 años después. La firma de alta costura lo había despedido un año ya antes, tras 6 compilaciones muy vanguardistas. La ascensión de Saint Laurent fue inevitable. En mil novecientos setenta y dos, otro icono revolucionario de aquellos años convulsos, Andy Warhol, lo inmortalizó con 4 retratos serigrafiados, que abren ahora el museo.
La conocida cita de Bergé, “Chanel dio la libertad a la mujer, Saint Laurent le dio el poder” se hace en seguida patente con la exposición de las 4 primordiales prendas que el diseñador creó para la mujer, apropiándose de los atributos del vestuario masculino.
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